Nunca me había dado por hacer helados, pensaba que eran difíciles de elaborar, pero la verdad que con pocos ingredientes y sin tener heladera podremos disfrutar de un delicioso helado de fresas congeladas como el que os propongo hoy. ¡Está buenísimo!
Había tenido la precaución de congelar unas cuantas fresas para poder hacer gazpacho y helados en verano.
Para que queden más cremosos os recomiendo utilizar azúcar invertido, en su defecto miel, se usa para que al congelar el helado no se formen cristales de hielo.
Como no tengo heladera, para que quede cremoso lo bato unos segundos cada hora con unas varillas eléctricas (un total de 3 o 4 veces) y lo meto en el congelador.
No sé si durante el verano compraré alguna heladera, pero de esta forma quedan bastante bien y no almaceno tantos electrodomésticos en casa.
La nata se puede sustituir por leche evaporada (congelada), al llevar menos grasa quedará menos cremoso.
INGREDIENTES:
70 gr de azúcar
30 gr de azúcar invertido
300 gr de fresas congeladas
300 gr de nata para montar fría (Asturiana)
Barquillos
ELABORACIÓN:
1- Poner el azúcar en el vaso, pulverizar 20 segundos, velocidad progresiva 5-10.
2- Añadir las fresas congeladas, triturar 30 segundos, velocidad progresiva 5-10.
Bajar los restos que hayan quedado por las paredes.
3- Agregar el azúcar invertido y la nata, programar 1 minuto, velocidad 5.
4- Verter en un recipiente, tupper, bol de acero inoxidable... y meter en el congelador.
5- Pasada la primera hora, sacar del congelador y batir unos segundos con unas varillas eléctricas. Repetir la operación 3-4 veces, así se romperán los posibles cristales de hielo y después dejar enfriar del todo en el congelador. Tapar bien con papel film y su tapadera.
* En heladera: verter en la cubeta helada, proceder según instrucciones.
Mantecar unos 20 minutos.
6- Sacar del congelador unos 10 minutos antes de su consumo.
¡Qué aproveche!
Fuente: Thermorecetas y Ana Sevilla.
Chonchi
